Por Rogelio Rodríguez Mendoza.
Diputados locales están promoviendo reformas al Código Penal de Tamaulipas, para aumentar la pena de prisión a quienes recurran a la inteligencia artificial para el robo de identidad y la violación a la intimidad.
De prosperar la iniciativa de decreto, presentada por el legislador del PAN, Gerardo Peña Flores, el robo de identidad a través de inteligencia artificial se castigaría hasta con 7.5 años de prisión. Actualmente la pena va de uno a cinco años de cárcel.
Respecto al delito de violación a la intimidad, si el responsable recurre a herramientas de inteligencia artificial, la pena se agravaría hasta en una tercera parte, lo que se traduciría en 10.6 años.
A la fecha, el código punitivo establece que: “Al responsable del delito de violación a la intimidad, se le impondrá una pena de cuatro a ocho años de prisión y multa de mil a dos mil veces el valor diario de la Unidad de Medida y Actualización”.
Para justificar su propuesta, Peña Flores señaló que, durante los últimos años se han registrado cambios acelerados en las tecnologías, que han cambiado el modo de captar, procesar y comunicar el mundo.
“Dentro de estos cambios destacan tres fundamentales: por un lado las tecnologías avanzadas que facilitan la captura de datos personales, como la imagen personal y la voz a través de cámaras fotográficas adaptadas en celulares e instrumentos de grabación; por otro lado, herramientas tecnologícas que aprenden a tomar decisiones autónomas, como si fueran inteligencia humana, mismas que se relacionan a su capacidad para aprender, razonar y percibir; y que conocemos como inteligencia artificial; y por último las plataformas de comunicación, que facilitan el envío y propagación masiva de información, en particular fotografías voz y video” indicó.
El uso ilícito de estos cambios tecnológicos se ha vuelto recurrente por el enorme potencial dañino que tienen, sobre todo cuando se propagan a través del ciber espacio.
“Es común que se difundan audios o videos falsos en los que se hacen alteraciones de la verdad, a fin de exponer a la víctima, ya sea tanto en su intimidad sexual, o bien pretender hacerla partícipe en la comisión de diversos delitos, que dañan el honor y reputación de las personas” mencionó.
De esa situación, dijo, surge la necesidad de legislar al respecto, criminalizando esas conductas.