Este sábado, el sureste de México se iluminará con el espectáculo del eclipse solar anular conocido como el «anillo de fuego». Los más privilegiados para observar este fenómeno serán aquellos que se encuentren en la península de Yucatán, especialmente en sitios arqueológicos emblemáticos como Oxkintok, Uxmal y Edzná.
Según Eddie Salazar Gamboa, astrónomo y matemático emérito de la Universidad Autónoma de Yucatán, este tipo de fenómeno solar no se veía en la región desde hace 404 años, exactamente desde el 15 de enero de 1619. Tras este sábado, tendremos que esperar hasta el 9 de noviembre de 2292 para volver a presenciar un «anillo de fuego» similar.
El eclipse comenzará a las 9:51 hora local y concluirá a las 13:17, con una duración total de tres horas, 26 minutos y nueve segundos. No obstante, el momento de máximo esplendor, cuando se podrá apreciar el anillo completo, será breve: comenzará a las 12:21 y culminará a las 12:26, alcanzando su pico a las 12:24.
Zonas arqueológicas en el sur de México, como Uxmal, Oxkintok y Edzná, ofrecerán un lapso de observación ligeramente mayor, de más de cuatro minutos. Ante la expectación generada, el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) está preparando operativos especiales en varios sitios prehispánicos.
El interés por este fenómeno no es solo astronómico. Los mayas, maestros de la astronomía, registraban meticulosamente los eclipses y les otorgaban una importancia especial. Salazar Gamboa señala que estos eventos astrales solían causar temor entre los mayas, lo que los llevó a investigarlos intensamente. En el Códice de Dresde, por ejemplo, se ilustra un eclipse con una serpiente devorando a Kin, el dios solar maya.
Incluso hoy, en algunas regiones, las comunidades indígenas realizan rituales durante los eclipses, produciendo ruidos con ollas o instrumentos musicales antiguos para prevenir que el Sol «devore» a la Luna, y viceversa.
Finalmente, una recomendación para quienes deseen disfrutar del fenómeno: es fundamental usar lentes especiales certificados para proteger la vista y evitar daños oculares. ¡Prepárate para un espectáculo celeste sin igual!