CIUDAD VICTORIA, Tamaulipas.- Al grito de, “somos docentes, no somos delincuentes”, miles de maestros marcharon sobre la avenida Hidalgo hasta llegar a Palacio de Gobierno, para exigir al gobierno del estado respuestas a sus demandas, entre las que destaca la renuncia de la secretaria dé Educación, Lucía Aimé Castillo Pastor.
El grito de reclamo de los maestros se debe a que desde muy temprano de este martes, cientos de agentes de la Guardia Estatal llegaron a «blindar» el Palacio de Gobierno, e intensiticaron el patrullaje en los alrededores.
Tal como lo había advertido el secretario general de la sección 30 del SNTE, Arnulfo Rodríguez Treviño, desde muy temprano de este martes llegaron a la Ciudad miles de maestros de distintos municipios del estado.
Con ello, el sindicato magisterial endureció las protestas del profesorado, al cumplirse 7 días de la toma del edificio sede de la Secretaría de Educación y de 14 Centros Regionales de Desarrollo Educativo (Credes), y seis días de suspensión de clases.
La principal exigencia de los maestros es la renuncia de la secretaria de Educación y sus principales colaboradores, a quienes acusan de maltratar a los maestros y “ningunear” al sindicato.
La tarde del lunes, el gobernador, Américo Villarreal Anaya, acudió al plantón de maestros frente a la SET para intentar convencerlos de levantar su protesta y regresar a dar clases.
Sin embargo, los docentes se negaron.
“Usted haga los cambios (en la SET) y en quince minutos levantamos el plantón”, planteo Rodríguez Treviño.
Luego de algunos minutos de diálogo, el mandatario se retiró, mientras los maestros coreaban: “Fuera Lucía”, “Fuera Lucía “, y “Ni un paso atrás, ni un paso atrás”.
Con ello, no se vislumbra una salida pronta al conflicto, porque ambas partes se mantienen en su postura: El SNTE a exigir la renuncia de la secretaria de Educación y el Gobierno en su negativa.
La situación se agravará porque los maestros “tomaron” la plaza Juarez, donde el próximo 15 de septiembre habrá de realizarse la ceremonia del Grito de Independencia. Se estima que suman alrededor de siete mil los docentes en plantón.