Por ROGELIO RODRIGUEZ MENDOZA.
Formalmente las campañas políticas finalizaron el pasado miércoles, pero este jueves los diputados panistas y morenistas se olvidaron de ello y aprovecharon la tribuna legislativa para intentar “llevar agua a su molino”.
Desde la tribuna legislativa, durante la sesión ordinaria celebrada este jueves, unos y otros quisieron aprovechar los reflectores mediáticos para promover a sus partidos.
Los legisladores del partido guinda no quisieron arriesgarse a que les hicieran lo de la semana pasada, cuando la presidenta de la mesa directiva clausuró la sesión sin que se desahogara el apartado de asuntos generales, y esta vez usaron el espacio de la sesión dedicado a iniciativas para fijar posicionamientos.
No les importó violar la ley del Congreso con tal de promover presuntos logros del gobierno federal de Morena.
“Por más que brinquen y pataleen para negar el trabajo del gobierno federal, los hechos están a la vista. No se pueden refutar los hechos” dijo Armando Zertuche Zuani, y luego presumió que, en apenas tres años, la administración del presidente, Andrés Manuel López Obrador, este a punto de terminar una refinería y haya comprado otra en Texas.
Ya en el apartado de asuntos generales, se pegaron con todo. Intercambiaron acusaciones de todo tipo. Se dijeron “bola de corruptos”, gavilleros, sátrapas, traidores, sinvergüenzas.
Así se la llevaron durante más de dos horas, con una sola intención: congraciarse con el electorado. El objetivo era descalificarse unos a otros. Los de Morena acusando al gobierno de persecución política, y los del PAN reclamando a los diputados guinda sus nexos con el empresario Sergio Carmona Angulo, ejecutado en Nuevo León en noviembre pasado.
“Lo bueno es que después del domingo se van a aplacar”, comentó un ciudadano que veía el desorden desde las galerías del recinto legislativo.
La verdad, en lo personal tengo mis dudas de que luego de la elección las cosas se vayan a tranquilizar en el Congreso del Estado. Independientemente de quien gane la gubernatura, lo más probable es que los enfrentamientos suban de tono.
Además, el actual mandatario no soltará el poder hasta el último día de su mandato, lo cual debe preocupar a quienes enfrentan carpetas de investigación o tienen órdenes de aprehensión. Personajes como los alcaldes de Reynosa, Carlos Peña Ortiz y Eduardo Gattás Báez, están equivocados si le están apostando al triunfo de su partido para salvar los procesos penales en su contra.
No será así porque al gobierno panista le restarán todavía casi tres meses de ejercicio.
El punto es que, los diputados azules y guindas usaron la tribuna para hacer campaña a favor de sus partidos y sus candidatos.
Este viernes tendrán oportunidad de seguir haciéndolo, cuando se den otro agarrón en la comisión instructora, ante quien deberá comparecer la coordinadora de Morena, Úrsula Patricia Salazar Mojica.
La diputada tendrá la oportunidad de aportar pruebas de su inocencia en los cargos por cohecho que le imputa la fiscalía especializada en combate a la corrupción.
Los panistas, quienes tienen mayoría en la comisión, van a hacer todo lo posible por sacarle ventaja al hecho. Querrán usar nuevamente a la legisladora para descalificar los principios morenistas de no robar, no mentir y no traicionar.
Por todo ello, se espera un nuevo agarrón entre las dosfuerzas políticas, peor que el que se dieron este jueves en tribuna.
Vale decir que, aunque lo niega, Salazar Mojica se ve preocupada y temerosa. Tanto que pidió a su defensa tramitarle amparos para evitar su detención, los cuales le han sido negados.
ASI ANDAN LAS COSAS.