En pleno corazón de Ciudad Victoria, sobre la icónica avenida Hidalgo de la Capital del Estado, existe una alcantarilla dañada, convertida en trampa peligrosa para peatones y automovilistas. Ante la apatía de las autoridades municipales, y particularmente de la Comapa, para atender el problema, algún ciudadano bien intencionado optó por colocar la rama de un árbol como advertencia del riesgo existente. A esto hemos llegado por el valemadrismo de las autoridades municipales y estatales.