Por Rogelio Rodríguez Mendoza.
El Congreso del Estado analizará una iniciativa de Ley del Fondo de Capitalidad, que obligaría al gobierno local a asignar, anualmente, a Ciudad Victoria, el uno por ciento del presupuesto estatal, que representa en promedio 630 millones de pesos.
La iniciativa de los diputados de Morena, José Braña Mojica y Juan Vital Román Martínez, se suma a la que presentó, el 17 de noviembre pasado, la priista Alejandra Cárdenas Castillejos, con la que demanda a la Secretaría de Finanzas, prever recursos extraordinarios para Victoria en el presupuesto del 2022.
Braña Mojica explicó que la iniciativa deberá ser analizada y dictaminada en Comisiones en los siguientes días, para someterla a la votación del Pleno, probablemente en la sesión ordinaria del próximo martes.
La intención es que la ley sea aprobada junto con el paquete económico del próximo año, para que la Capital del Estado reciba recursos extraordinarios a partir del 2022.
La acción legislativa busca que el Fondo de Capitalidad inicie con el uno por ciento anual del presupuesto estatal, pero que cada año vaya creciendo hasta llegar al 1.6 por ciento.
Los recursos destinados para rubros prioritarios, como obra pública, abasto de agua, recolección de basura y alumbrado público, entre otros.
“Esperemos que el gobernador este consciente de los capitalinos y sus necesidades” indicó.
En otros estados como San Luis Potosí ya existe una Ley del Fondo de Capitalidad.
La iniciativa de ley contempla la creación de un consejo, integrado por dos representantes del ayuntamiento, dos del gobierno del estado, dos diputados y un representante de la sociedad civil, quienes vigilarían la aplicación de los recursos.
Anualmente, Ciudad Victoria ejerce un presupuesto de poco más de mil millones de pesos. La propuesta del Cabildo para el 2022 es de mil 048 millones 665 mil 399 pesos.
A diferencia de otros municipios, como Matamoros, Reynosa, Nuevo Laredo y Tampico, Victoria no tiene fuentes de ingresos económicos extraordinarias. Su presupuesto surge de las participaciones federales y estatales, y solo una mínima parte de ingresos propios, a través del cobro de tributos como el predial.
Debido a ello, y a las malas administraciones municipales que ha padecido, que incluso han estado envueltas en acusaciones de corrupción, Victoria enfrenta un grave rezago en su desarrollo, con graves problemas de abasto de agua y deficientes servicios primarios.