Por Redacción Noticentro.
La Diputación Permanente del Congreso del Estado hizo un llamado a los diputados federales, para que impulsen una reforma legal que permita frenar la venta ilícita de chips y teléfonos celulares robados.
Con el respaldo unánime de los legisladores asistentes a la sesión del órgano parlamentario, fue avalada éste lunes una iniciativa de punto de acuerdo presentada en noviembre pasado por el grupo parlamentario del Partido Acción Nacional (PAN).
La acción legislativa busca generar mecanismos de control que impidan la comercialización sin control de celulares robados y la venta indiscriminada de las llamadas tarjetas SIM, que se han convertido en herramienta de secuestradores y extorsionadores.
El exhorto consiste en un llamado : “para que (los legisladores federales) implementen una reforma a la legislación en materia de telecomunicaciones y radiodifusión, con el fin de combatir la venta y activación ilegal de teléfonos celulares robados, así como de tarjetas SIM, ya que éstos son usados para llevar a cabo, entre otros delitos, la realización de llamadas falsas o de broma al número de emergencia 911, lo cual dificulta a las autoridades competentes identificar y sancionar a los delincuentes”.
Para justificar su propuesta, los diputados panistas refieren que, al no haber control sobre la venta de celulares y chips, se facilita la realización de delitos como el secuestro, la extorsión, y otros, porque es difícil rastrear a los responsables.
Otro factor que contribuye al problema es la existencia de negocios que se dedican a desbloquear aparatos telefónicos.
“Esto se genera por la falta de protocolos de seguridad más estrictos por parte de algunas compañías de telefonía celular respecto al registro y control de sus clientes, sobre todo en la modalidad de venta de líneas prepago, las cuales suelen venderse sin hacer exigible el registro de datos de identidad de quien las adquiere, así también no se le otorga el debido seguimiento a los equipos de celulares que tienen reporte de robo” detallaron.
Además, el fácil acceso a celulares y chips permite que se hagan miles de llamadas falsas al 911, generando grandes pérdidas económicas a lo que se suma una afectación a la sociedad porque se distrae a los cuerpos de seguridad pública y de auxilio.
Tan solo durante octubre pasado, el 911 recibió en Tamaulipas 34 mil 006 llamadas falsas o de broma.
Los legisladores recordaron que el Código Penal de Tamaulipas prevé sanciones para quienes hagan llamadas falsas al 911, pero precisamente por la falta de control sobre los celulares es imposible rastrear a los responsables.