Ya se veía venir que se presentaría una solicitud de expulsión de los gobernadores acusados de corrupción y abuso del poder público, es decir de Javier Duarte de Ochoa de Veracruz, Roberto Borge Angulo de Quintana Roo y de César Duarte Jáquez de Chihuahua, como sucedió ayer cuando el consejero político nacional del PRI, Armando Barajas Ruiz, demandó proceder contra de ellos ante la Comisión Nacional de Justicia Partidaria.
Desde el pasado el pasado 11 de julio se veía que no se les perdonarían sus fechorías luego de que el vocero de la Presidencia de la República, Eduardo Sánchez Hernández y el Subprocurador Jurídico y Asuntos Internacional de la PGR, Salvador Sandoval Silva, solicitaron en forma conjunta a la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) analizara la inconstitucionalidad de las reformas que promovieron los mandatarios estatales para evitar ser juzgados cuando concluyan sus respectivas administraciones.
Barajas Ruiz presentó ayer un escrito en donde detalla las acusaciones que hay en contra de los gobernadores, como es el caso del mandatario veracruzano, quien tiene 26 denuncias por probables hechos delictivos ante la Auditaría Superior de la Federación (ASF), que encabeza Juan Manuel Portal Martínez.
En el escrito también señala que el gobernador Duarte Jáquez tiene 17 denuncias por supuestos desvíos de recursos públicos ante la ASF, mientras que el mandatario quintanarroense tiene en contra varias demandas por el uso indebido del erario estatal, entre otros presuntos delitos.
No es la primera vez en que Barajas Ruiz presenta una solicitud de expulsión de un dirigente del PRI acusado de corrupción y abuso del poder, puesto que promovió un juicio político en contra de Cuauhtémoc Gutiérrez de la Torre, quien fue acusado de promover la prostitución cuando fue dirigente del tricolor en la Ciudad de México.
Gutiérrez de la Torre, mejor conocido como el “Príncipe de la Basura”, heredó el imperio que forjó su padre, Rafael Gutiérrez Moreno, quien se hizo inmensamente rico a costa de la explotación de miles de pepenadores que vivían de los desperdicios del basurero de Iztapalapa en la Ciudad de México.
Aunque Gutiérrez de la Torre dejó de ser dirigente del PRI en el Distrito Federal, nunca se le expulsó porque tuvo la protección del entonces dirigente nacional del tricolor César Camacho Quiroz.
Es por eso, que surge la pregunta: sé el nuevo dirigente nacional del PRI, Enrique Ochoa Reza, se atreverá a proceder en contra de los gobernadores acusados de corrupción y de abuso del poder público.
No hay ninguna seguridad a pesar del desprestigio del PRI provocado por los mandatarios estatales, aunque existe la posibilidad ante la demanda de inconstitucionalidad presentado en contra de ellos por órdenes directas del Presidente Enrique Peña Nieto.
Además, Ochoa Reza ayer sostuvo una larga reunión con integrantes de la fracción priísta de la LXI Legislatura Federal, quienes le solicitaron poner orden dentro del partido luego de que hubo traiciones u omisiones dentro de las filas del tricolor que propiciaron las derrotas del pasado 5 de junio.
En temas más amables, el director general del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Mikel Arriola Peñalosa, dio a conocer una excelente noticia para las mujeres embarazadas porque a partir de ahora podrán administrar libremente sus semanas de incapacidad y traspasar hasta cuatro semanas del periodo prenatal al pos parto.
Esta medida no sólo les permitirá a las madres estar más tiempo con sus hijos recién nacidos, sino también propiciará que los niños sean amamantados por más tiempo y logren obtener de la leche materna las defensas necesarias para su sano desarrollo.
Arriola Peñalosa también reveló que las mujeres embarazadas no tendrán que ir a sus clínicas para ser valoradas, cuya medida no sólo romperá con el martirio de la burocracia, sino también le significarán grandes ahorros para el IMSS que podrán ser usados en la construcción de más clínicas.
Correo electrónico: [email protected]