Por Rogelio Rodríguez Mendoza.
En Tamaulipas, ocho de cada diez jóvenes que trabajan por su cuenta no tienen posibilidad real de acceder a una vivienda, no por falta de ganas, sino por sus bajos ingresos frente a un mercado inmobiliario cada vez más caro, advirtió el diputado, José Abdo Schekaiban Ongay.
Derivado de ello, el panista presentó una iniciativa de decreto para reformar reformar la Ley de los Derechos de las Personas con Discapacidad y la Ley de Vivienda para Tamaulipas, a fin de reconocer expresamente el derecho a una vivienda adecuada para las personas con discapacidad, e incorporar a las y los jóvenes como población prioritaria.
Además, pretende incluir los lotes con servicios básicos dentro de los apoyos , y ajustar criterios de créditos, subsidios y programas de suelo para que estos sectores tengan, al menos por ley, una puerta real hacia la vivienda.
El diputado por Tampico señaló que, de acuerdo con cifras de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE), en el primer cuatrimestre de 2025 había alrededor de 50 mil jóvenes tamaulipecos de entre 15 y 29 años laborando como trabajadores independientes, sin acceso a un régimen formal de vivienda.
De esos 50 mil jóvenes, cerca de 28 mil —el 56 por ciento— perciben apenas un salario mínimo al día, unos 8 mil 364 pesos mensuales. Otros 12 mil —el 24 por ciento— ganan hasta dos salarios mínimos, alrededor de 16 mil 728 pesos mensuales.
En síntesis, detalla la iniciativa, el 80 por ciento de los jóvenes independientes de Tamaulipas vive con menos de 17 mil pesos al mes, un ingreso muy por debajo de los requisitos que exigen los créditos hipotecarios, incluso los destinados a vivienda económica.
El texto también advierte que más de 6 mil jóvenes perdieron o abandonaron su negocio propio en el primer cuatrimestre del año, por lo que actualmente no cuentan con ingresos estables ni capacidad real para aspirar a un crédito, mucho menos para reunir un enganche.
A ello se suma —señala el legislador con datos de la Sociedad Hipotecaria Federal— el incremento del costo de la vivienda en el estado. Tamaulipas registró un alza anual de 10.4 por ciento, por encima del promedio nacional de 8.4 por ciento; Matamoros alcanzó incrementos de hasta 11.8 por ciento y Reynosa de 10.7 por ciento.
La iniciativa sostiene que los programas de Infonavit y Fovissste atienden principalmente a trabajadores formales, excluyendo casi por completo a quienes laboran de manera independiente, especialmente jóvenes y personas con discapacidad, que quedan sin una vía efectiva para construir patrimonio.




