Por Rogelio Rodríguez Mendoza.
Tamaulipas ya cuenta con una legislación específica para proteger los árboles en zonas urbanas, luego de que el Pleno del Congreso del Estado aprobó, este martes, la Ley para la Conservación y Protección del Arbolado Urbano, con la que se busca garantizar el mantenimiento, reforestación y manejo técnico de las áreas verdes en las ciudades.
La nueva ley fue impulsada por el diputado morenista, Isidro Vargas Fernández, y establece obligaciones concretas tanto para los ayuntamientos como para la Secretaría de Desarrollo Urbano y Medio Ambiente, que deberán coordinarse en programas de vigilancia, educación ambiental y sanción de actos que dañen el entorno vegetal urbano.
Entre sus disposiciones destaca la creación de un Registro Estatal de Prestadores de Servicios Ambientales, el fortalecimiento del control sobre podas y derribos, así como la incorporación de la denuncia popular como mecanismo ciudadano de defensa ecológica.
La legislación contempla 78 artículos distribuidos en 15 capítulos, que regulan la plantación, conservación, manejo y sustitución del arbolado en calles, plazas y espacios públicos, considerando las características de cada región y los riesgos asociados a la falta de planificación.
Los ayuntamientos serán responsables de emitir permisos para podas, trasplantes o derribos, con vigencia de tres años, y deberán justificar cualquier intervención sobre árboles nativos o de valor ambiental.
La ley reconoce los beneficios sociales, ecológicos y de salud pública que aporta el arbolado urbano, como la purificación del aire, la regulación del clima, la retención de agua y la preservación de la biodiversidad en entornos urbanos.
Con esta aprobación, Tamaulipas se suma a entidades como Jalisco, Veracruz, Yucatán y Ciudad de México, que ya cuentan con leyes específicas en la materia. La nueva norma se alinea con la Ley General del Equilibrio Ecológico y con programas federales como PROAIRE y PRONAFOR.
La ley entrará en vigor tras su publicación en el Periódico Oficial del Estado, y representa un paso importante hacia un desarrollo urbano más sustentable y respetuoso del medio ambiente.