Texas se encuentra en medio de una crisis climática sin precedentes, con 88 condados bajo emergencia declarada por el gobernador Greg Abbott. Las severas inundaciones y el clima extremo han llevado a la ampliación de la declaración de desastre para incluir 59 condados adicionales, elevando el total a 88.
Según el Servicio Meteorológico Nacional, se prevén inundaciones fluviales de moderadas a graves en el este del estado durante las próximas dos semanas. Un video publicado por The Weather Channel muestra cómo las intensas lluvias han provocado desbordamientos de ríos y arroyos en el sureste de Texas, con niveles de agua alcanzando hasta 30 centímetros.
Las consecuencias de las tormentas son evidentes en las carreteras, muchas de las cuales han sido arrasadas o se han vuelto intransitables. Las autoridades han instado a los conductores a permanecer en sus hogares y a tener precaución al enfrentar cualquier inundación. El Servicio Nacional Meteorológico de Houston ha emitido una advertencia particular: «¡Tenga cuidado al sumergirse en aguas de las que se desconozca la profundidad! Esto será más peligroso por la noche, cuando las señales son más difíciles de reconocer”.
La situación climática prevista para el fin de semana empeora, con condiciones severas y lluvias excesivas que podrían desencadenar inundaciones repentinas en todo el estado. Los riesgos incluyen no solo inundaciones, sino también granizo grande, vientos fuertes y posibles tornados, advierte la alerta emitida por el gobierno de Abbott.
En medio de esta crisis, los residentes de Texas están siendo llamados a tomar medidas de precaución y a estar atentos a las actualizaciones del clima y las instrucciones de las autoridades locales para garantizar su seguridad en medio de estas condiciones climáticas extremas.