Los estafadores han elevado su juego. Según la Asociación de Bancos de México (ABM), una nueva estrategia de fraude implica convencer a la gente de que su cuenta bancaria está en riesgo y que necesitan transferir su dinero a una «cuenta segura». Sin embargo, ese «refugio seguro» resulta ser la cuenta del propio estafador.
David Herrerías Corzo, del Grupo de Trabajo de Prevención de Fraudes de la ABM, compartió que los delincuentes llaman a las personas afirmando que su cuenta está siendo atacada. A continuación, los guían para transferir sus fondos a una nueva cuenta, supuestamente a salvo de ataques. «El cliente, creyendo que habla con un representante bancario legítimo, sigue los pasos. Aunque parezca sorprendente, esto sucede con frecuencia», afirmó.
Pero eso no es todo. En México, donde el uso de efectivo sigue siendo popular, los cajeros automáticos se han convertido en otro punto de ataque. Los delincuentes están instalando cámaras diminutas en los cajeros para grabar cuando los usuarios ingresan su contraseña y NIP. «Estas cámaras pueden ser tan pequeñas como 2 a 3 milímetros de diámetro», alertó Herrerías Corzo.
Como medida preventiva, algunos bancos han cambiado la impresión de la información de las tarjetas al reverso, y otros incluso han eliminado por completo los números de los plásticos.
Desde la ABM, la recomendación es clara: Si vas a usar un cajero, nunca aceptes ayuda de extraños, no entregues tu tarjeta y siempre cubre el teclado cuando ingreses tu NIP.